No a todo el mundo le gusta tener el sofá lleno de pelos de Bobi. Veamos juntos cómo enseñar a tu perro a no subirse al sofá.
Es bien sabido que a los perros les encanta tumbarse en el sofá para descansar, sentarse en el sillón o incluso acurrucarse en el sofá para recibir un abrazo o ver la televisión con su humano.
Sin embargo, no a todo el mundo le gusta encontrar los pelos de su amigo de cuatro patas en el sofá y limpiarlos continuamente. Por esta razón, muchas personas intentan no dejar a Bobi en el sofá, lo cual no es fácil pero tampoco imposible. Veamos cómo enseñar a tu perro a nosubirse al sofá.
Normalmente, cuando hay niños en casa, se piensa en adaptar los muebles para que se adapten a ellos, por ejemplo, cuando se habla de sofás, se hacen sofás a prueba de bo.
Pero, a menudo, los que viven con un amigo peludo también buscan un sofá fuerte y sensible, digamos a prueba de perros. Sin embargo, para evitar que éste lo «destruya» o lo llene de pelo, es posible dar a la pequeña bola de pelo algunas reglas claras.
Siguiendo algunos consejos de adiestramiento, podemos enseñar a nuestro amigo de cuatro patas a no subirse al sofá. Sin embargo, es muy importante que estas normas educativas se den al perro cuando llega a la casa por primera vez.
Si tu amigo peludo puede subirse al sofá desde el principio, se acostumbrará y podrás negarle el acceso al sofá.
También es muy importante ser coherente: si has decidido enseñar a Bobi a no subirse al sofá, nunca debes pedirle que se tumbe junto a ti en el sofá en el futuro. Dicho esto, veamos algunos consejos para mantener a tu perro alejado del sofá.
¿Cómo mantener a su perro alejado del sofá? Con la formación adecuada
Los mejores consejos para enseñar a su perro a no subirse al sofá
Dependiendo de la situación, hay ciertos puntos a seguir. Por ejemplo, si Bobi ya se ha subido al sofá, ¿cómo podemos bajarlo?
Simplemente distraiga a su perro ofreciéndole algo tan acogedor como el sofá, por ejemplo una cama nueva.
Sin embargo, es importante, como en todo entrenamiento, utilizar el refuerzo positivo, así que cuando Bobi se levante del sofá dale una recompensa y dirígelo hacia su perrera.
Hazlo cada vez que tu perro se suba al sofá, recordando que nunca debes ser agresivo ni gritar a tu amigo de cuatro patas. Todo lo que tienes que hacer es ser paciente y tomarte el tiempo necesario para entrenar a Bobi.
Muchas veces cuando notas a tu perro puedes saber cuando está a punto de subirse al sofá, de hecho siempre busca el consentimiento de su humano mirándole a los ojos. En este caso podemos evitar que el perro se suba al sofá, ¿cómo?
Simplemente míralo y con voz firme, sin gritar, dile al perro«¡No!». Si Bobi conoce la orden «No», se detendrá y no se subirá al sofá.
Si, por el contrario, no has conseguido detener a tu amigo de cuatro patas a tiempo, repite la operación anterior, es decir, haz que tu perro se baje dándole la orden «Abajo» y dale la recompensa dirigiéndolo a su caseta o manta, lo que sea co para Bobi.
Cómo enseñar a su perro a recuperar la pelota: consejos prácticos
Por último, debes recordar que no todos nuestros amigos de cuatro patas son iguales, cada uno tiene su propio carácter, algunos pueden tener un carácter fuerte y no aceptar el cambio. En este caso, debe ponerse en contacto con un educador.