cómo hacer la mejor elección

Adopción de cachorros o perros adultos. ¿Cuáles son las diferencias?

adoptar un cachorro o un perro adulto

Se acercan las Navidades y mucha gente espera que le regalen un cachorro peludo. Un compañero de cuatro patas con el que compartir un viaje vital.

Por qué regalar un animal

Muchos niños sueñan con tener una mascota peluda a la que abrazar bajo el árbol de Navidad. La Navidad es el símbolo de la familia, una fiesta que nos recuerda la importancia del amor, la solidaridad y la unión entre sus miembros.

¿Qué mejor fiesta para desear la llegada de un nuevo miembro de la familia que la Navidad?

En los últimos años, la relación con la mascota ha evolucionado. Un perro, un gato, así como un conejillo de indias u otro roedor o adole de plumas se han convertido en parte de la familia.

Un animal de compañía tiene muchas aportaciones buenas dentro del hogar y en la vida de una persona:

  • Para los niños desarrolla la empatía, la responsabilidad y es un compañero con el que pueden compartir sus estados a lo largo del día.
  • Hace un par más unidos
  • Ayuda a las personas mayores a mantenerse sanas
  • Ayuda a combatir la soledad

Un animal de confianza con el que descubrir un nuevo lenguaje basado en la comunicación sin palabras.

Este animal ayuda a las personas a ser más tolerantes y a aceptar.

No todo el mundo quiere un animal en su casa. Algunas personas se sienten limitadas por la higiene o porque un animal les exige demasiado. A otros no les gustan nada los animales y no quieren que se les restrinja su libertad.

Entre los que desean firmemente un perro o un gato o cualquier otro animal como regalo, hay que hacer una distinción.

  • los que quieren un animal porque creen que es un juguete
  • los que quieren una mascota porque son amantes de los animales

Los animales, una responsabilidad

Demasiados abandonos atestiguan la irresponsabilidad de la gente al adoptar o comprar un animal por capricho. Muchos perros o gatos regalados en Navidad son abandonados cuando surgen los primeros temores. Algunas personas incluso abandonan a un animal después de las fiestas de Navidad y después de la Epifanía.

Lo que siempre se señala en las campañas de sensibilización institucional es que un animal es un acto de responsabilidad.

Esto impone la conciencia de los individuos. Un animal de compañía implica compromisos y tiene muchas necesidades según la especie:

  • la necesidad de atención veterinaria: vacunas, controles
  • necesidad de atención: debe interactuar con las personas, ser manipulado y sentirse parte del núcleo, de lo contrario corre el riesgo de sufrir soledad
  • debe tener su propio espacio en el hogar
  • debe poder salir al menos tres veces al día, en el caso de un perro
  • Todas las especies necesitan atención: desde la limpieza diaria de la jaula de un pájaro, la de un hámster o la de una pecera hasta la caja de arena de un gato.
  • accesorios

Además, un animal es una responsabilidad económica. Los gastos de atención veterinaria, alimentación, accesorios y aseo requieren un compromiso económico que debe ser bien meditado antes de adoptar un animal.

Adopción de cachorros

Un cachorro es quizás una de las criaturas más bellas a las que acercarse. Todos los cachorros son maravillosos, y quizá por eso atraen a millones de personas en todo el mundo.

Sin embargo, un cachorro se convierte en un adulto. Nunca seguirá siendo esa incómoda y mimosa bola de pelo.

  • Crece, forma su propio carácter, se relaciona con otros animales, siente gustos y disgustos propios de su especie, se encariña con su dueño, puede enfermar y requiere muchos cuidados.
  • Puede tener miedo a muchas cosas, como un fuego abierto, demasiado ruido o quedarse solo.
  • Puede escaparse y perderse, lesionarse o ser víctima de un injerto.

Un cachorro también es un reto en los primeros meses de su gestión:

  • Ensuciará, orinará y hará sus necesidades por toda la casa. Hay que educarlo con el tiempo, enseñándole las reglas de la casa y dónde hacer sus necesidades.
  • llora porque quiere atención y necesita compañía
  • Siempre quiere jugar y es capaz de destrozar cualquier cosa en la casa (zapatos, romper muebles, cables eléctricos, electrodomésticos, etc.).

Quien decida hacerse con un cachorro debe ser consciente de los compromisos que requiere y estar dispuesto a armarse de mucha paciencia para educar al animal de forma cariñosa.

  • Deben asumir los costes iniciales de las vacunas, la esterilización/castración y los controles veterinarios.
  • Además, el carácter de un perro también puede variar según la raza y o.
  • Razas de perro que necesitan ser muy activas, otras que necesitan un contacto constante con su dueño o que tienden a ser dominantes.

Todos estos factores deben tenerse en cuenta a la hora de elegir un cachorro. Algunas razas, como los Rottweiler o los Pit Bull o Bullmae, son hoy en día muy populares, son morfológicamente muy potentes y desde el punto de vista del carácter tienden a ser dominantes. Razas que podrían acabar dominando a sus dueños si no se gestionan bien.

Los perros, como los gatos o cualquier otro animal, tienen especies que deben ser consideradas y bien pensadas.

Adoptar un cachorro debe ser una elección bien meditada desde muchos puntos de vista:

  • elección de la raza
  • el estilo de vida (piso o jardín)
  • si se queda muchas horas solo en casa
  • si es adecuado para una persona sola, una familia o una persona mayor
  • las patologías más comunes
  • si es amigable y apto para convivir con otros animales

Son seres vivos que merecen nuestro respeto y no deben ser vendidos como bienes de consumo.

Le puede interesar->

Preguntas frecuentes sobre el cachorro cuando llega a casa

Adopción de perros adultos

Lo mismo ocurre con la adopción de un perro adulto. Las perreras y los refugios están llenos de perros adultos que buscan un hogar. Hay numerosos anuncios y llamamientos para los animales abandonados que se encuentran vagando por las calles. Animales que han sido maltratados, incautados y confinados en una caja.

  • Un perro adulto, a diferencia de un cachorro, en la mayoría de los casos ya está educado.
  • Tiene sus propios hábitos
  • Tiene su propio carácter formado que puede evaluar
  • Ha aprendido a vivir con sus traumas
  • Necesita mucho cuidado para gestionar sus miedos
  • Sus patologías son conocidas
  • Adoptar un perro adulto significa trasladar a un animal que ya se ha formado y ha aprendido a conocer a los humanos y a encontrar su propio espacio en un hogar.

Adoptar un perro adulto es un gesto de puro amor, una forma de dar una nueva vida a un animal que probablemente ha sufrido en el pasado o se ha encontrado sin hogar de la noche a la mañana.

En este escenario, también es posible considerar la adopción de un perro anciano que está condenado a morir solo, sin cariño y tras los barrotes de una caja fría.

Leer-> Thor, la nueva vida para el viejo perro que espera una familia en la perrera

Deja un comentario