¿Se ha preguntado alguna vez si los perros pueden fingir una cojera? Veamos si nuestros amigos de cuatro patas pueden ser tan inteligentes.

Hay muchas razones por las que un perro puede cojear. Un esguince al jugar a correr, la presencia de alguna lesión en la pata o sus almohadillas, o incluso la presencia de alguna enfermedad ósea grave.
Pero, ¿te has preguntado alguna vez si Bobi sólo finge sentir dolor en ese momento? Veamos juntos si los perros pueden fingir una cojera y, si es así, por qué lo hacen.
Cojera del perro: causas y soluciones

¿Puede un perro fingir que cojea? Sí, pueden hacerlo. Nuestros amigos peludos pueden ser mimados y fingir que sienten dolor sólo para llamar la atención. Quizá se pregunte, pero ¿de dónde viene este comportamiento?
Puede parecerte extraño, pero hemos enseñado a Bobi a «fingir que cojea». De hecho, cada vez que nuestro amigo peludo siente dolor, estamos dispuestos a dedicarle nuestro tiempo y atención para que se sienta seguro y tranquilo.
Es precisamente esta atención la que, cuando el perro no recibe mimos, hace que se haga el listillo y empiece a fingir una cojera, ya que sabe que recibirá atención porque creemos que le duele. Un poco como cuando el perro empieza a gemir para llamar la atención.
Pero, ¿cómo podemos saber si Bobi cojea? En primer lugar, es muy importante comprobar si el perro ha sufrido una lesión o un esguince en la a y, por tanto, tiene un dolor real; mejor tratar que descuidar la problemas. Para salir de dudas, si tu perro cojea, debes llevarlo al veterinario.
Puede mover la a de su perro para localizar el origen del dolor y buscar signos como la hinchazón de la pata del perro o el enrojecimiento de la misma. Si el perro que cojea es anciano, también puede sufrir artritis. En este caso, puede resultarte útil el artículo: Artritis en perros: causas, síntomas, tratamiento y remedios naturales.
A continuación, observe atentamente a su perro cuando cojea, sobre todo si lo hace siempre a la misma hora. Especialmente si Bobi te mira con dulzura mientras cojea, porque probablemente no tiene dolor sino que simplemente quiere tu atención.
Su perro finge que cojea: qué hacer

Lo primero que hay que hacer cuando un perro cojea, como se ha mencionado anteriormente, es asegurarse de que no tiene dolor. Por lo tanto, es importante llevar al perro al veterinario.
En el caso de que el especialista no encuentre problemas fi en su amigo de cuatro patas, entonces el perro está sngendo. Cuando tu amigo peludo muestre este comportamiento, procura no prestarle atención.
En cuanto tu perro deje de cojear y mueva la pata con normalidad, prémialo y acarícialo, así animarás a Bobi a arrastrar la pata.