El desarrollo evolutivo del perro está directamente relacionado con la evolución del hombre. Distintas culturas adoptaban muchas variedades de perros domesticados que a través de los años les brindaron compañía y protección. Se les asignaron a lo largo del tiempo, numerosas tareas, como vigilancia de propiedades o de ganado, para caza mayor o cobradores etc. También se los adopto como perros de compañía o falderos muy apreciados por nobles. El perfeccionamiento de las cruzas aleja a las razas actuales cada vez más de su antepasado más directo… El lobo.
Sus orígenes: Los perros domésticos, así como también los coyotes, chacales, lobos, y dingos forman el género canis. A través de diversos estudios realizados con restos fósiles se estima que los primeros ejemplares del género aparecieron hace unos diez millones de años en América del Norte, y luego emigraron hacia el continente asiático o Eurasia. Se cree que el antepasado del perro domestico es el lobo ya que tienen la misma cantidad de dientes así como otras características similares. También el comportamiento en especial cuando están en jaurías.
Hace aproximadamente 15.000 años los lobos y los humanos comenzaron a interactuar. Había dos tipos de lobos en el hemisferio norte: los del norte eran grandes, con pelaje largo y pálido, y los del sur eran más esbeltos con pelaje corto y más oscuro.
Perros salvajes: El género Canis es formado por la familia de los cánidos. Se originó en América del norte hace 57 millones de años.
Domesticación del perro: La domesticación del perro es posible que se haya iniciado en los tiempos en que nuestros antepasados comenzaron a dedicarse a la caza y a la recolección. Los perros salvajes rondaban los alrededores de los campamentos alertando a los cazadores de posibles peligros. Luego fueron adoptados por familias como mascotas. Para cuando los asentamientos de residencia permanente empezaron a surgir los perros fueron utilizados como guardianes, como ovejeros y/o como perros de tiro.
Entonces los perros fueron criados para realizar tareas específicas cruzando animales que tenían los rasgos necesarios como por ejemplo energía o agresividad. Gracias a esto, se obtuvieron a lo largo del tiempo, ejemplares totalmente distintos en temperamento y tamaño.
Razas antiguas: Los perros mastines y los sabuesos son las razas reconocibles más antiguas. En fragmentos de cerámicas mesopotámicas de 8.000 años de antigüedad se encontraron dibujos de sabuesos, y también de mastines casi de la misma época. Los perros sabuesos eran empleados como perros de caza y los grandes mastines como perros de pelea, guardianes y también eran utilizados en las batallas. Entre los miembros figuran zorros, lobos y mapaches. Así como los perros domésticos, los perros salvajes mantuvieron una larga relación con los humanos, pero no todos los contactos han sido positivos, y ahora hay muchas especies en peligro de extinción. Las 35 especies actuales de perros salvajes viven en todo el mundo. Los perros salvajes son fundamentalmente carnívoros pero, gracias al sistema digestivo adaptable que poseen también comen frutas, insectos, víboras y gusanos y los dingos de Australia comen desde saltamontes hasta canguros.
El perro domestico actual: Como ya habíamos citado, las variedades de perros se desarrollaron a medida que las necesidades de los humanos lo necesitaron, por ejemplo los perros de caza. Para el siglo XIX, los perros obtenidos por reproducción planificada no solo cazaban la presa sino que también la olían (sabuesos de rastreo), la señalaban (pointers o setters), las hacían levantar vuelo (perros de agua o spaniels), la atrapaban (retrievers) y las sacaban de las madrigueras (terriers).
También los perros fueron criados como atractivo estético. Hace 5.000 años los emperadores chinos criaban diminutos perros ornamentales que servían como animales de compañía.
La creciente era industrial de los siglos XVIII y XIX fue muy importante. La gente empezó a tener mas tiempo para dedicarse a sus actividades preferidas, y a mediados del siglo XIX la cría y exhibición de perros era un pasatiempo popular, por ende se focalizo en el aspecto del perro y surgió una gran variedad de razas. En 1873, el recién asentado Kennel Club de Gran Bretaña publicó sus propios estándares para cuarenta razas, además de estipular que para que una raza fuera reconocida tendría que inscribirse en el Club. En el mundo actual puede haber unas 500 razas. En la actualidad los criadores y los clubes caninos buscan no reproducir perros cuyos rasgos puedan hacer peligrar su bienestar.