Proteja las patas del gato del calor: los peligros del verano al aire libre – 8 de julio de 2020
El verano es momentáneo, pero para nuestras mascotas hay muchos peligros. Las patas del gato son muy sensibles al calor y corren un gran riesgo.
Una de las partes más bonitas y lindas de un gato son las patas. Pero no solo son tan adolescentes, sino que son extremadamente interesantes en cómo se elaboran. Sus rodamientos tienen una gran cantidad de receptores nerviosos, que los gatos usan tanto para mantenerse equilibrados como para cazar a sus presas. Además, el hecho de que haya tantos receptores nerviosos significa que las patas de nuestro gato son extremadamente sensibles. Pero precisamente debido a la alta sensibilidad que los distingue, las patas del gato son muy sensibles a la presión, el dolor y las temperaturas, especialmente en verano con el calor. En el exterior, los gatos también pueden sufrir quemaduras graves, y si el piso o el asfalto donde caminan están muy calientes, pueden sufrir daños en los nervios.
10 Consejos para proteger al gato en verano: cómo refrescarlo
Cómo proteger las patas del gato del calor
Ya hemos explicado en el pasado que es mejor hacer que un gato viva en la casa, dejándolo salir solo cuando puede estar en la fila y controlado, y siempre en entornos limitados como patios o jardines cercados. La vida exterior está llena de peligros, por mucho que un gato, como buen explorador y cazador, sienta su atractivo primitivo.
Una buena manera de mantener al gato en casa y dejarlo salir por un tiempo es instalar una tienda de campaña en el jardín o una cerca, para hacer que nuestro gato juegue al máximo ritmo sin perderlo de vista y sin preocupaciones .
Pero en cualquier caso, cuando nuestro gato está al aire libre, debemos tener cuidado de mantener sus piernas calientes. El asfalto hirviendo, el piso de la acera que se sobrecalienta y cualquier otro tipo de exceso de trabajo pueden dañar sus delicados rodamientos.
Fortalecimiento y curado de las piernas
Dado que las patas del gato son tan sensibles, es importante encontrar dioses para fortalecerlas y mantenerlas siempre cuidadas y calientes (y no solo). La mayoría de los gatos que viven al aire libre tienden a tener más rodamientos de reent que aquellos que tienen un gato que vive solo en casa, porque se fortalecen con el tiempo de forma independiente.
Pero no es imposible mejorar la adaptabilidad de las patas del gato para la vida al aire libre y, por lo tanto, hacerlas más reententes. Con un poste áspero o un aguacero donde nuestro gato puede frotar sus piernas, será que sus rodamientos ganen más fuerza.
Y, por supuesto, la protección para las patas de nuestro gato es indispensable. Quizás no esté de acuerdo en dejar que una crema se extienda sobre sus patas, pero un bálsamo que pospondrá las quemaduras y las divisiones de la piel, y protegerlos del calor es muy útil.
Son muchos bálsamos para piernas, adecuados para mascotas (tanto perros como gatos) porque sin mangos para nuestros peludos. También son muy útiles en invierno, para proteger las piernas de nuestras cuatro patas del frío, el hielo y la sal que se pueden encontrar en el suelo.
Otra cosa fundamental es limpiar y controlar las piernas de nuestro gato diariamente. Después de haber estado afuera, es importante verificar si hay signos de daño en los rodamientos y las piernas, o si son escombros pegados entre sus dedos. Limpiamos suavemente las piernas y aplicamos el acondicionador nuevamente si es necesario.
Este tipo de control para el cuidado de las piernas de nuestro gato no debe hacerse solo si el gato vive afuera: incluso si un gato vive solo dentro de la casa, puede enfrentar algún peligro para sus piernas, ya que los usa para muchas cosas y siempre debe permanecer perfectamente en forma.
Cómo limpiar las patas del gato al regresar a casa y otras precauciones
Comprueba el super yo camino el gato
Si es posible, es mejor que nuestro gato no camine sobre un sobreimpulso que tiende a calentarse (piso, asfalto, baldosas y materiales similares), pero que permanece en la hierba. Obviamente, no todos pueden poner al gato en un súper que no se calienta, pero si es posible, es mejor usarlo.
Otro buen aliado en el jardín puede ser una glorieta para gatos (un «Catio»), como ya hemos indicado cuando hablamos de la vida afuera para un gato que vive en casa. Evitar que el gato tenga acceso a pisos realmente calientes es la forma más fácil de evitar daños en los rodamientos y las piernas.
Además, cuando está al aire libre, nuestro gato siempre debe tener un área protegida y sombreada, donde pueda descansar y refrescarse, pero siempre a una distancia cercana para permanecer bajo control. También son muchas almohadillas refrescantes para animales, que pueden ser realmente interesantes para nuestro gato!
Tener una zona de enfriamiento puede ayudar no solo a proteger las patas del gato del calor, sino también a evitar otros posibles pemas de verano como la deshidratación y el golpe de calor. En verano, es esencial tener un poco más de control sobre nuestro gato cuando está al aire libre. Si notamos signos de calor excesivo en el gato, lo llevemos inmediatamente adentro para poder enfrentar algo serio.